IV Domingo de Pascua – Guión para la eucaristía

IV Domingo de Pascua – Guión para la eucaristía

ESCUCHAR LA VOZ DE JESÚS Y SEGUIR SUS PASOS          

         Para Jesús ser de los suyos significa escuchar su voz y seguirle.  

Después de veinte siglos, los cristianos de hoy necesitamos recordar de nuevo que esto es lo esencial para ser la Iglesia de Jesús.

Necesitamos en nuestras comunidades saber captar la Palabra que viene de Jesús en toda su frescura y sintonizar con su Buena Noticia.

Si no queremos que nuestra fe se vaya diluyendo progresivamente en formas decadentes de religiosidad superficial, en medio de una sociedad que invade nuestras conciencias con mensajes, consignas, imágenes, comunicados y reclamos de todo género, hemos de aprender a poner en el centro de nuestras comunidades la Palabra viva, concreta e inconfundible de Jesús, nuestro único Señor. Pero no basta con escuchar su voz, sino que además es necesario seguir a Jesús.

Ha llegado el momento de decidirnos entre contentarnos con una «religión de cumplimiento» que tranquiliza las conciencias, pero ahoga nuestra alegría, o aprender a vivir la fe cristiana como una aventura apasionante de seguir a Jesús que consiste en creer lo que Él creyó, dar importancia a lo que Él dio, defender la causa del ser humano como Él la defendió, acercarnos a los indefensos y desvalidos como Él se acercó, confiar en nuestro Padre Dios como Él confió y enfrentarnos a la vida y a la muerte con la esperanza con que Él se enfrentó.                               

LECTURAS DE LA EUCARISTÍA

1ª LECTURA

Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles 13,14. 43-52 

En aquellos días, Pablo y Bernabé desde Perge siguieron hasta Antioquía de Pisidia; el sábado entraron en la sinagoga y tomaron asiento. 

Muchos judíos y prosélitos practicantes se fueron con Pablo y Bernabé, que siguieron hablando con ellos, exhortándolos a ser fieles a la gracia de Dios. 
El sábado siguiente, casi toda la ciudad acudió a oír la palabra de Dios.

Al ver el gentío, a los judíos les dio mucha envidia y respondían con insultos a las palabras de Pablo. Entonces Pablo y Bernabé dijeron sin contemplaciones: 
– Teníamos que anunciaros primero a vosotros la palabra de Dios; pero como la rechazáis y no os consideráis dignos de la vida eterna, sabed que nos dedicamos a los gentiles. Así nos lo ha mandado el Señor: «Yo te haré luz de los gentiles, para que lleves la salvación hasta el extremo de la tierra». 

Cuando los gentiles oyeron esto, se alegraron y alababan la palabra del Señor; y los que estaban destinados a la vida eterna creyeron. 

La palabra del Señor se iba difundiendo por toda la región. Pero los judíos incitaron a las señoras distinguidas y devotas y a los principales de la ciudad, provocaron una persecución contra Pablo y Bernabé y los expulsaron del territorio. 

Ellos sacudieron el polvo de los pies, como protesta contra la ciudad, y se fueron a Iconio. Los discípulos quedaron llenos de alegría y de Espíritu Santo.

Palabra de Dios.

COMETARIO A LA 1ª LECTURA

     El apóstol Pablo y Bernabé en Antioquía proclamaban la palabra de Dios a los judíos, pero como la rechazaron se dedicaron a proclamarla a los gentiles, porque consideraban que era lo que el Señor les pedía.

Los gentiles se alegraron y alababan la palabra de Dios que se fue difundiendo por toda la región. Por la envidia de los judíos fueron expulsados y huyeron a otra ciudad.

SALMO 

Sal 99, 2. 3. 5 
R. Nosotros somos su pueblo y ovejas de su rebaño.
 

  •  
    servid al Señor con alegría, 
    entrad en su presencia con vítores. R:
  •  
    que él nos hizo y somos suyos, 
    su pueblo y ovejas de su rebaño. R:
  •  su misericordia es eterna, 
    su fidelidad por todas las edades». R:

2ª LECTURA

Lectura del libro del Apocalipsis 7,9. 14b-17 

Yo, Juan, vi una muchedumbre inmensa, que nadie podría contar, de toda nación, raza, pueblo y lengua, de pie delante del trono y del Cordero, vestidos con vestiduras blancas y con palmas en sus manos. 

Y uno de los ancianos me dijo: 
– Éstos son los que vienen de la gran tribulación: han lavado y blanqueado sus vestiduras en la sangre del Cordero. 

Por eso están ante el trono de Dios, dándole culto día y noche en su templo. 
El que se sienta en el trono acampará entre ellos. 

Ya no pasarán hambre ni sed, no les hará daño el sol ni el bochorno. Porque el Cordero que está delante del trono será su pastor, y los conducirá hacia fuentes de aguas vivas. Y Dios enjugará las lágrimas de sus ojos.

Palabra de Dios.

COMETARIO A LA 2ª LECTURA

     El evangelista Juan, con un lenguaje apocalíptico, ofrece palabras de consuelo y esperanza en medio de las dificultades de los que quieran seguir a Jesús, porque al final después de soportar multitud de obstáculos y sufrimientos, llegará un momento en que todo eso pasará y «la alegría, el gozo y la paz» serán su premio.                                       

EVANGELIO

Lectura del santo evangelio según san Juan 10,27-30 

En aquel tiempo, dijo Jesús: 
– Mis ovejas escuchan mi voz, y yo las conozco, y ellas me siguen, y yo les doy la vida eterna; no perecerán para siempre, y nadie las arrebatará de mi mano. 

Mi Padre, que me las ha dado, supera a todos, y nadie puede arrebatarlas de la mano del Padre. Yo y el Padre somos uno.

Palabra de Dios

COMENTARIO SOBRE EL EVANGELIO

 Jesús es el Buen Pastor, porque nos orienta y nos guía, ha dado su vida por nosotros. Jesús nos dice que quien le acepte y escuche su voz y siga sus pasos, tendrá vida para siempre.           

PARA NUESTRA REFLEXIÓN PERSONAL

LA COMUNIDAD, PROYECTO DE JESÚS

         Jesús con la alegoría del pastor y el rebaño quiere comunicarnos el mensaje de que su proyecto para los que quieran seguirlo es la comunidad.

Jesús nos dice que Él sigue estando en medio de los suyos, siendo vínculo de unidad y creando comunión en ella. El único cristianismo posible es el cristianismo vivido en comunidad fraterna.  

       Uno no es cristiano por tener tal nivel de virtud o espiritualidad, sino por estar ensamblado en la familia de Dios. El cristiano es el que tiende la mano, el que hace cadena con los demás hermanos. La Iglesia es la “mesa familiar” en la que todos comen el mismo pan.       

Según decía S. Cipriano en el s. IV: “Un solo cristiano no es ningún cristiano”. Es decir, un cristiano en solitario es un imposible. El Vaticano II afirma rotundamente: “Dios ha querido salvar a los hombres en comunidad”.


LECTURAS PARA LA EUCARISTÍA DEL DOMINGO

1ª LECTURA

1ª lectura: Hechos de los Apóstoles 4,8-12

En aquellos días, Pedro, lleno del Espíritu Santo, dijo:
Jefes del pueblo y senadores, escuchadme: porque le hemos hecho un favor a un enfermo, nos interrogáis hoy para averiguar qué poder ha curado a ese hombre.

Pues quede bien claro, a vosotros y a todo Israel, que ha sido el nombre de Jesucristo Nazareno, a quien vosotros crucificasteis y a quien Dios resucitó de entre los muertos; por su nombre, se presenta éste sano ante vosotros.

Jesús es la piedra que desechasteis vosotros, los arquitectos, y que se ha convertido en piedra angular; ningún otro puede salvar y, bajo el cielo, no se nos ha dado otro nombre que pueda salvarnos.

Palabra de Dios

COMENTARIO A LA 1ª LECTURA

El apóstol Pedro, lleno del Espíritu Santo, proclamaba que Jesús, al que ellos habían crucificado y Dios lo había resucitado, era el autor de la curación de un enfermo. Jesús es el único que nos puede salvar.

Los Apóstoles proclamaron que no hay salvación fuera del camino de Jesús.

SALMO

R: La piedra que desecharon los arquitectos, es ahora la piedra angular.

• Dad gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia.
Mejor es refugiarse en el Señor que fiarse de los hombres;
mejor es refugiarse en el Señor, que fiarse de los jefes. R:
• Te doy gracias, porque me escuchaste y fuiste mi salvación.
La piedra que desecharon los arquitectos, es ahora la piedra angular.
Es el Señor quien lo ha hecho; ha sido un milagro patente. R:
• Bendito el que viene en nombre del Señor,
os bendecimos desde la casa del Señor.
Tú eres mi Dios, te doy gracias.
Dios mío, yo te ensalzo.
Dad gracias al Señor porque es bueno,
porque es eterna su misericordia. R:

2ª LECTURA

Lectura de la primera carta del apóstol san Juan 3,1-2

Queridos hermanos:
Mirad qué amor nos ha tenido el Padre para llamarnos hijos de Dios, pues lo somos. El mundo no nos conoce porque no lo conoció a Él.

Queridos: ahora somos hijos de Dios y aún no se ha manifestado lo que seremos. Sabemos que, cuando se manifieste, seremos semejantes a Él, porque lo veremos tal cual es.

Palabra de Dios

COMENTARIO A LA 2ª LECTURA

El amor de Dios hacia nosotros es fuente inagotable de nuestra esperanza. Una esperanza que no se agota en la vida presente y que es la que nos da la fuerza para hacer frente a un mundo que es hostil a nuestra fe cristiana.

EVANGELIO

Lectura del santo evangelio según san Juan 10,11-18

En aquel tiempo, dijo Jesús a los fariseos:
Yo soy el buen Pastor. El buen Pastor da la vida por las ovejas: el asalariado, que no es pastor ni dueño de las ovejas, ve venir al lobo, abandona las ovejas y huye; el lobo hace estrago y las dispersa; y es que a un asalariado no le importan las ovejas.

Yo soy el buen Pastor, que conozco a las mías y las mías me conocen, igual que el Padre me conoce y yo conozco al Padre; yo doy mi vida por las ovejas.

Tengo, además, otras ovejas que no son de este redil: también a ésas las tengo que traer; y escucharán mi voz y habrá un solo rebaño y un solo Pastor.

Por esto me ama el Padre: porque yo entrego mi vida para poder recuperarla. Nadie me la quita, sino que yo la entrego libremente. Tengo poder para entregarla y tengo poder para recuperarla: este mandato he recibido de mi Padre.

Palabra de Dios

COMENTARIO AL EVANGELIO

Jesús se define a sí mismo como el «Pastor bueno» en contraposición al «mercenario». El pastor bueno, si es preciso, se deja quitar la vida, con tal que las ovejas no se vean amenazadas, en peligro, divididas o dispersas. Al «mercenario» lo único que le interesa es su salario y no las ovejas.