Huida a Egipto – 33 días de Consagración a San José (16/33) del Padre Guillermo Serra

Huida a Egipto – 33 días de Consagración a San José (16/33) del Padre Guillermo Serra

DÍA 16 – HUIDA A EGIPTO (2 de marzo)

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, amén.

Señor, Dios Padre Todopoderoso, ten piedad de nosotros.

Sagrado Corazón de Jesús, en vos confío.

Espíritu Santo, Fuente de luz. Ilumínanos.

María, Madre de gracia, Madre de misericordia, en la vida y en la muerte ampáranos gran señora.

San José, ruega por nosotros.

CITA

Avisado del ángel, huye José de noche precipitadamente a Egipto, ¡qué angustia, qué temor!

Mas ve caídos en el suelo los ídolos de los egipcios y a Jesús libre del furor de Herodes. ¡Qué alegría!

REFLEXIÓN

No sabemos exactamente cuánto tiempo pasó la Sagrada Familia en Belén y lo que habrá tenido que hacer José para sobrevivir y darles lo necesario a Jesús y a María.

Cumplieron con el precepto de presentar a Jesús en el templo y algún tiempo después, nuevamente en sueños, recibe la indicación de huir a Egipto para evitar que Herodes mate al niño.

¡Qué misterio! Jesús era el Hijo de Dios, el Mesías Redentor, pero necesitaba que él, un simple carpintero, lo resguardara del peligro.

Fuera de la concepción y el parto virginal de Jesús, no había hasta el momento nada fuera de lo común con respecto a su pequeño.

Aun así, José lo adoraba como su Dios y estaba dispuesto a seguir cada una de las indicaciones que recibiera como parte de su misión, sin importar lo que a él le costara.

Habrá tenido ocasión de comentar el sueño con María, de preparar unas cuantas cosas y uno o dos días después, saldrían de noche rumbo a Egipto. No era un viaje fácil y seguramente tomaron una ruta menos transitada aunque más larga, complicada o fatigosa.

Se establecieron en Egipto como extranjeros exiliados durante aproximadamente dos años, en los que José habrá trabajado arduamente sin dejar a un lado sus deberes como educador de Jesús. Siempre obediente, siempre sereno, siempre fiel.

PROPÓSITO

Analiza tu lista de propósitos de inicio de año e identifica algo que crees que es importante que hagas y que no te has decidido a hacer. Pide a san José que interceda ante Dios por ti para que encuentres el valor y la determinación necesaria.

ORACIÓN A SAN JOSÉ

San José, guardián de Jesús y casto esposo de María,
tú empleaste toda tu vida en el perfecto cumplimiento de tu deber,
tú mantuviste a la Sagrada Familia de Nazaret con el trabajo de tus manos.
Protege bondadosamente a los que recurren confiadamente a ti.
Tú conoces sus aspiraciones y sus esperanzas.

Se dirigen a ti porque saben que tú los comprendes y proteges.
Tú también conociste pruebas, cansancio y trabajos.
Pero, aun dentro de las preocupaciones materiales de la vida,
tu alma estaba llena de profunda paz y cantó llena de verdadera alegría
por el íntimo trato que goza con el Hijo de Dios,
el cual te fue confiado a ti a la vez que a María, su tierna Madre.
Amén.

(San Juan XXIII)